La mamoplastia de aumento se realiza colocando un implante debajo del músculo pectoral y la glándula mamaria (técnica en doble plano). En esta localización se consigue a medio y largo plazo un resultado mucho más natural y duradero, suavizándose el contorno de las prótesis, fundamentalmente en su polo superior. Las incisiones, de unos tres centímetros, se colocan en el pliegue mamario inferior o en el borde inferior de la areola. La intervención se practica bajo anestesia general habitualmente.
Existen diferentes tipos de prótesis mamarias, dependiendo de su forma y contenido, por lo que su elección vendrá determinada por las características particulares de cada paciente, adecuando en cada caso aquel implante que sea más conveniente.
La duración de la cirugía suele ser de una hora y media, siendo dada de alta la paciente al día siguiente de la intervención.